Iban 4 minutos de juego y Losada ya se había tirado 2 veces. Belgrano puso sus líneas defensivas cerca del propio arco y Talleres demostró una vez más que no reemplazó debidamente a los delanteros que se fueron.
Cobija no es el problema, forma parte de la solución. El DT siempre cumplió cada vez que le “tiraron” el equipo adaptándose a las circunstancias. Se viene la B, que seguramente meterá 2 líneas de 5 para aguantar el resultado.
Los cambios constantes que se producen en el club como consecuencia de los intereses económicos de Fassi, provocan que Talleres tenga un techo y no pueda aspirar a ganar un campeonato.
Con el Kempes a full, Talleres logró vencer a Huracan por 2 a 1 sobre el final. Los verdaderos refuerzos en este segundo semestre serán los jugadores que se quedaron.
El hincha de Talleres siempre fue paladar negro, pero además de eso, ahora en lugar de conformarse con estar en primera o ingresar a la Sudamericana, pretende jugar la Libertadores o ganar un campeonato.
Han transcurrido 20 fechas y Talleres está prendido en la pelea por el campeonato. ¿Sus argumentos? Un plantel de jerarquía y un técnico serio que trabaja y tiene los pies sobre la tierra.