Talleres completó un buen mercado de pases y la gente se ilusiona.
Por Esteban Migliazzo.
¿Está para campeón? Eso es imposible de asegurar. ¿Está para pelear arriba en los 3 frentes? A priori, la respuesta es sí. Talleres ha completado un mercado de pases más que auspicioso.
Las llegadas de Botta, Bou, Portillo, Portilla y la permanencia en el plantel de Guido, Sosa y Nahuel, generan en la gente, y seguramente en Fassi y el plantel, una expectativa optimista con miras al 2024.
Sin dudas, Botta es uno de los mejores 10 de la Argentina y en él recaerá la responsabilidad de “hacer jugar” al Matador. Físicamente aparenta estar bien para aguantar al menos 60 minutos.
También pareciera ser que se ha formado una nueva pareja y la hinchada lo festeja. Es cierto que sólo han jugado un partido, pero la dupla Portilla/Portillo ha demostrado que puede ser el fiel de la balanza que equilibre las cosas en la mitad de la cancha entre el ataque y la defensa.
Guido y Sosa son viejos y queridos conocidos. Ellos son una garantía en sus respectivos puestos.
Faltaba la llegada de un 9 para competirles a Nahuel (para nosotros más media punta que delantero) y a Girotti. Ese animal del gol, finalmente llegó: Se llama Gustavo Bou.
¿Entonces, está todo asegurado? No. Habrá que ver cómo se adapta el DT Ribonetto al puesto de entrenador de primera y cuál será su propuesta de juego, si la del primer tiempo frente a Huracán o la de la segunda mitad del mismo partido.
En síntesis; Talleres lo tiene todo. Gente, jugadores, dirigentes, historia, título internacional, etc. Sólo falta eso. Sí, eso.