En estas cuatro fechas, el Matador ha convertido verdaderos golazos a favor, pero también fue principal protagonista en los goles que recibió.
Por Esteban Migliazzo:
“Talleres siempre es protagonista. No importa la cancha o la categoría. El Albiazul siempre va al frente y brinda espectáculo“. Este viejo dicho, se hace realidad una vez más.
Frente a Instituto, durante el primer tiempo, el equipo no tuvo la actitud necesaria y regaló tácticamente 45’. Pero luego, las cosas se acomodaron. Botta comenzó a jugar más en la franja central, y los ingresos de Martínez y Juan Portillo, quien siempre queda condicionado por alguna amonestación temprana, fueron un acierto.
Lo cierto es que hasta ahora, Talleres ha sido su propio verdugo a la hora de contabilizar los goles en contra: Frente a Gimnasia, gol en contra. Con Huracán, el árbitro dio el bote a tierra y la línea defensiva no se enteró. Contra Central, se cometió un penal evitable y enfrentando a Instituto, otro penal evitable y un pase mal dado mientras el equipo estaba en posición de ataque.
Hay juego, hay jerarquía, pero no hay que olvidarse que los campeonatos se ganan cuando se está en todos los detalles.
