Esta vez, la víctima fue Platense. En otra gran actuación colectiva, Talleres le metió 4.
Juega lindo, es vistoso y práctico. No depende de que 1 o 2 de sus figuras estén enchufadas para ganar un partido porque en este plantel, hay más de 7 jugadores que por sí solos le pueden dar un triunfo. Finalmente, la tan deseada y requerida jerarquía, se ha hecho presente en la T.
Si Sosa no tiene una buena tarde, aparecerán Garro y Pizzini. Si Villagra no está iluminado, automáticamente Franco será el auxilio perfecto. Si Santos sale, entrará Nahuel (Ya la empezará a meter más seguido) y cuando Valoyes se vuelva a encontrar consigo mismo, entonces el combo será completo.
El fondo presentó algunas zozobras frente al Calamar, pero se nota que hay buena madera y firmeza.
¿Entonces? ¿Talleres es invencible?
No. El año será largo e intenso. Hay muy buenos competidores y habrá que ver qué grado de regularidad puede alcanzar este equipo. Allí estará la clave.
Gandolfi sabe a qué debe jugar y los jugadores hasta ahora interpretan a la perfección el libreto, a tal punto que frente a Boca, Central Córdoba y Platense prácticamente cerró los partidos en los primeros minutos de los primeros tiempos.
El camino es el correcto, pero el trayecto es largo. “Tú no has ganado nada aún” diría Chila. “Paso a paso” aconsejaría Mostaza.
